¿Es posible reducir la jornada laboral al mismo tiempo que mantener los salarios y el beneficio empresarial?


En las últimas semanas, la propuesta del Gobierno español de reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales ha generado un intenso debate en el país.

La medida, aplaudida por algunos como un paso hacia una mejor conciliación entre la vida laboral y personal, ha sido criticada por otros por su posible impacto negativo en la productividad y los beneficios empresariales.

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Argumentos a favor de la reducción de la jornada laboral

  • Mayor conciliación: Reducir la jornada laboral permitiría a los trabajadores disponer de más tiempo para dedicar a su vida personal y familiar, lo que podría tener un impacto positivo en su bienestar y salud mental, que se traduce fácilmente en una mayor eficiencia en el puesto de trabajo.
  • Mejora de la productividad: Algunos estudios sugieren que una jornada laboral más corta puede aumentar la productividad de los trabajadores, ya que estarían más descansados y motivados.
  • Mayor igualdad de género: Las mujeres son más propensas que los hombres a tener responsabilidades de cuidado familiar, por lo que una reducción de la jornada laboral podría ayudar a cerrar la brecha de género en el mercado laboral.

Argumentos en contra de la reducción de la jornada laboral

  • Disminución de la productividad: Las empresas podrían ver una reducción en su productividad si sus empleados trabajan menos horas.
  • Aumento de los costes: Reducir la jornada laboral sin cambios en la retribución de los trabajadores podría suponer un aumento de los costes laborales para las empresas.
  • Pérdida de competitividad: Las empresas españolas podrían perder competitividad frente a sus homólogas en otros países con jornadas laborales más largas.
  • Dificultad para las pymes: Las pequeñas y medianas empresas podrían tener más dificultades para implementar una reducción de la jornada laboral que las grandes empresas.
  • El pluriempleo: La medida abre las puertas a un escenario aún más exigente y duro para los trabajadores y las trabajadoras, al no ser suficiente el nivel de ingresos actual y disponer de algo más tiempo, es fácil caer en el pluriempleo. El gobierno griego ya limitó por Ley el número máximo de horas laborales al día para los pluriempleados (una medida que se confundió torpemente como una vuelta a la explotación laboral, cuando se hacía justo lo contrario, poner coto al mismo).

La cultura laboral en España: un obstáculo clave

Más allá de los argumentos a favor y en contra de la reducción de la jornada laboral, es importante considerar el contexto cultural en el que se plantea esta medida en España.

Como bien señalan algunos expertos, existe una absoluta falta de cultura laboral, profesional y empresarial orientada a resultados y a objetivos. En una cultura así, no importa las horas que trabajes sino lo que produces y consigues en esas horas.

Y esto no es algo que se pueda solucionar con una simple reducción de la jornada laboral a través de un decreto Ley. Necesita una solución integral: de cultura, de mentalidad y de normativa.

  • En este contexto, la simple reducción de la jornada laboral sin un cambio profundo en la cultura laboral española podría tener un impacto limitado. Es necesario fomentar una cultura de trabajo por objetivos, donde se valore la productividad y la eficiencia por encima de las horas trabajadas.
  • Al mismo tiempo, se requiere una mayor formación empresarial para que los líderes de las empresas comprendan los beneficios de una jornada laboral más corta y sepan cómo implementarla de manera efectiva.
  • Por último, es necesario un marco normativo flexible que permita a las empresas adaptar la jornada laboral a sus necesidades específicas, sin imponer horarios rígidos que puedan resultar contraproducentes.

En definitiva, la reducción de la jornada laboral en España es posible, pero no se trata de una medida aislada. Para que tenga éxito, es necesario un cambio profundo en nuestra manera de ser, en nuestra cultura de empresa, en nuestra mentalidad de aspirante eterno al puesto disponible en la administración pública.

Debe darse la oportunidad efectiva para que una persona, incluso trabajando solo 1 hora, pueda producir y ganar lo mismo que otra que trabaja 5 o 7 horas al día.

Si tú sabes que si haces lo que debes hacer en 3 horas, ganas lo mismo, la empresa obtiene lo que quiere y el resto del tiempo queda para ti, tú vas volverte extremadamente efectivo en tu tiempo y altamente productivo. Queda en tus manos si sigues trabajando más horas para ganar más dinero o si decides tener tiempo para ti, para quienes amas y para tus aficiones, ganando así calidad de vida.

Deberías de tener esa oportunidad sin que nadie obligue a la empresa, por normativa, a que fiches a una hora de entrada y otra de salida, incluso si en la práctica no estás haciendo nada útil. Esto es algo primitivo. Y va contra el bienestar de las personas.

Solo así se podrá crear un entorno en el que tanto los trabajadores como las empresas puedan beneficiarse de una jornada laboral más corta, sin sacrificar la productividad ni los beneficios empresariales.

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Este artículo ha sido redactado teniendo en cuenta las últimas noticias sobre la reducción de la jornada laboral en España, así como los argumentos a favor y en contra de esta medida.

Se ha hecho especial hincapié en la importancia de la cultura laboral en España como un factor clave a considerar para que la reducción de la jornada laboral sea un éxito.

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